Qué siente un niño con autismo frente a la pirotecnia

Carlos, de 15 años, contó la dura experiencia que vive cada año con los cohetes y las bengalas: "Siento que mi cabeza va a explotar, me aturde a mí, tengo los oídos hipersensibles, es estresante, para algunos es divertido, pero para mí es peligroso. Celebremos estas fiestas con más luces y sin ruido".

Ante casos como estos Joffre Galibert, fundador de la Asociación Argentina de Padres de Autistas, indicó a Radioinforme 3 que "más de la mitad de las personas con autismo tienen hipersensibilidad en los oídos".

"La gente se prepara y hay instructivos de cómo nos preparamos para el sufrimiento y la tortura y tratar de que esto pase cuanto antes", lamentó.

"Lo peor que le puede pasar a una persona con autismo es que se preparen antes, con precintos, tapones, revestir la casa, preparar a la familia, a los parientes, los balcones, no asomarse", explicó.

En cuanto a cómo los afecta relató que suelen tener actitudes de ira y sufrir mucho con estas situaciones.

"En el caso de mi hijo, se vestía como astronauta y nos preparábamos para sufrir. Estas cosas se van mejorando y la pirotecnia tiene la peor combinación de ruidos y de sonidos. Puede pasar cualquier cosa por su conducta y por su mente", agregó.

Entrevista de Miguel Clariá.