En un sólo día, se produjeron 25 focos de incendio en toda la provincia. Esta situación se repite asiduamente y más en esta época del año en que la elevada temperatura, la poca humedad y los fuertes vientos son una combinación letal para controlar incendios.
En este contexto, los Bomberos Voluntarios son los héroes silenciosos que salen temprano desde sus cuarteles para dirigirse a controlar algún foco y vuelven a medianoche después de estar horas luchando contra las llamas.
Gustavo García es jefe de Bomberos Voluntarios de Saldán y hace más de 30 años que participa de este tipo de operativos.
Este miércoles estuvo trabajando hasta las 2,30 de la mañana para contener el incendio que se había desatado en La Calera. A las 9, se sacó su traje color naranja y se puso el guardapolvo blanco: también es docente en una escuela de esa misma localidad.
"Estoy cansado pero bien. Por lo menos tranquilo porque logramos sofocar el incendio que nos tuvo a maltraer hasta la madrugada. Trabajamos 45 bomberos de toda la provincia a la par y todos juntos", expresó en Mesa de Café.
Una de las cuestiones que más preocupa al cuerpo de bomberos es que los incendios se están produciendo con mayor periodicidad que en otros años y que, la mayoría de ellos, son generados por el hombre.
García contó que el pasado martes, mientras coronaban un incendio arriba de una loma cerca de La Calera, observaron cómo tres hombres encendían otras llamas a unos metros.
"Con unos larga vistas vimos que tres personas estaban prendiendo fuego. Vimos cómo bajaban desde la loma. Llamamos a la Policía pero como son lugares remotos cuando llegan ya no los encuentran", contó.
Y agregó: "Le damos mucha manija a la prevención, repartimos folletos y vamos a las escuelas pero la verdad es que no sabemos si es que la gente tiene la vieja costumbre de quemar el campo para que salga pasto nuevo o si les encanta ver el accionar de los bomberos. Se divierten con esa situación y nos generan un problema".
Finalmente, García destacó el funcionamiento del Plan Provincial del Manejo del Fuego y resaltó el trabajo mancomunado de los cuarteles de todas las localidades.
"Esta iniciativa nos ha permitido dar una respuesta inmediata por parte de cuarteles vecinos para poder sofocar el incendio. En el momento que se desata uno convoca al plan y empiezan a bajar de todos lados. Además, se convoca a los medios aéreos. Antes estábamos días enteros combatiendo. Por ejemplo: ayer en Saldán en una hora apagamos un foco".
Otra de las heroínas silenciosas que se autoconvocaron para frenar el avance de las llamas fue Sandra Leiva, la jefa del cuartel de Bomberos Voluntarios de La Granja.
Sandra tiene 26 años y viaja todos los días desde esa localidad hasta Córdoba para completar sus estudios de Agronomía.
"Yo vivo acá y viajo todos los días. Estudio en la facultad de Ciencias Agropecuarias de la UNC. Estoy muy abocada en el tema de la vegetación y también en el tema de los incendios", contó.
Este martes, la joven estuvo 100% abocada a combatir un incendio que estaba asediando su localidad. Su cuartel subió a las montañas a las 7 de la mañana y bajaron a las 23.
"Subimos y nos encontramos con algo grande. Fue fuerte pero con el aprendizaje que tenemos vamos aprendiendo sobre esas experiencias. Bajamos a las 23 y quedaron en el lugar bomberos de Jesús María y de la Regional 7 haciendo guardia de cenizas. Volvimos en plena oscuridad, cenamos y cada uno a su casa", detalló la joven que es la única jefa de bomberos de la Regional 12.
Al ser consultada sobre si alguna vez sufrió discriminación por ser mujer, la joven no dudó en destacar que sus compañeros "siempre la incentivan a seguir".
"Es cierto que una tiene que demostrar más pero, como ellos me conocen, saben el respeto que les tengo".
Entrevista de Miguel Clariá
