Nicolás Burdisso expresó en diálogo con Miguel Clariá que siguió en su carrera “todos los valores”que le enseñaron sus padres y los que trata transmitirles a su hijo, tras anunciar en el Torino su retiro del fútbol después de 19 años de carrera profesional.
El cordobés, oriundo de la localidad de Altos de Chipión, jugó en Boca -donde obtuvo siete títulos, entre ellos dos Copas Intercontinentales-, en el Inter, la Roma, Genoa y Torino. Tuvo una extensa presencia en la Selección Argentina, donde salió campeón de la Copa Mundial Juvenil en 2001 y logró el oro olímpico en Atenas 2004.
“Fueron siete títulos con Boca. Hoy a la distancia ver dos Intercontinentales, haber ido a jugar tres Libertadores. La posibilidad de haber jugado en la Selección en mundiales, dos Copas América, el Mundial sub 20 de Argentina. Son recuerdos que me mantienen vivo”, valoró.
Y apuntó: “Pasó toda una vida. Esas imágenes de chico me emocionan muchísimo cada vez que las veo. Al principio era un sueño ir a jugar a Canal 12 con el equipo de mi pueblo. Después de haber hecho todo lo que pude hacer, me llena de mucho orgullo”.
Burdisso recordó que sus padres son docentes, y destacó que de ellos aprendió “muchísimo”. Siguen viviendo en Chipión y el deportista, que se fue a los 14 años, los ve cada vez que puede. Remarcó que lo que ellos le dieron le “sirvió para defenderse en la vida” y valoró la “calidad del tiempo” vivido con ellos.
Todo lo que pude hacer me llena de orgullo
Por el año 2005, el cordobés vivió el momento más duro de su vida por la leucemia de su hija Angelina y postergó su actividad futbolística en el Inter: “Tuve la posibilidad de dejar el fútbol porque me entendieron. No todos tienen la chance de dejar el trabajo para llevar el pan. Ahora ella tiene 15 años y está muy bien, es un recuerdo que no se borra y te fortalece como familia”.
Nicolás participa y colabora desde ese momento en ONG's y grupos de personas que se enfrentan a esta enfermedad en el mundo. Destacó que los jugadores de fútbol tienen “un compromiso social casi obligado”.
El futbolista tiene que tener un compromiso social casi obligado
Sobre la situación política y social en Argentina, opinó: “Me duele muchísimo Argentina. Más allá de tener una posición política, siempre tiré para adelante con quien esté en el Gobierno. Me duele porque nos gusta vivir en una situación de confusión constante. Tenemos que disfrutar del país maravilloso que tenemos”.
El referente “xeneize” adelantó que en Altos de Chipión, su “lugar en el mundo”, seguirá ligado al fútbol porque es lo que sabe hacer, le “apasiona” y que en el futuro volverá a Argentina. Admitió ser simpatizante de Instituto, porque su padre jugó en el club de Alta Córdoba e hincha de Boca.
Acerca de la pelea que tuvo con Lionel Messi en el partido contra Colombia por la Copa América 2011, reveló que “está todo más que bien” porque él mismo asumió la responsabilidad de la pelea y dijo que se equivocó. “A Messi lo tengo que defender en todo sentido, adentro y afuera de la cancha”, subrayó.
A Messi lo tengo que defender en todo sentido, adentro y afuera de la cancha
“Hice lo que e enseñaron a hacer. Seguí los valores que me marcaron mis viejos, y lo que trato de transmitirle a mi hijo”, concluyó.
En su web personal (www.nicolasburdisso.com) comparte con los lectores algunos detalles de su vida privada, entre ellos su pasión por la lectura:
Fontanarrosa, Soriano, Borges, Bioy Casares, Cortazar, Ernesto Sabato, están entre mis autores preferidos.