AUDIO: Doble vara para víctimas y verdugos
No puedo dejar de pensar en esas 22 nenas que, independientemente de lo que se hable, enfrentan una realidad que les arruina la vida. La situación es clara y desgarradora. Una foto, un momento, y sus vidas cambian para siempre.
Esa nena de 14 años tendrá que lidiar con las miradas de compañeros, maestros, amigos y vecinos, una carga que no debería llevar a su edad.
En Argentina, una nena de 14 años puede legalmente decidir interrumpir su embarazo, se la considera sexualmente madura para tomar esa decisión.
Sin embargo, un chico de 15 años no se lo considera lo suficientemente maduro para entender las consecuencias de sus actos.
Este doble estándar plantea serias preguntas sobre nuestra percepción de la madurez y la responsabilidad en la sociedad actual.
Es inaceptable que una nena de 14 años esté en la posición de tomar decisiones tan complejas, mientras que un chico de 15 años se percibe como un niño que "solo estaba jugando".
Esa mentalidad minimiza el daño causado a 22 compañeras que, lamentablemente, no volverán a la escuela.
Es hora de reflexionar sobre qué clase de medidas y criterios estamos aplicando en el desarrollo de nuestra sociedad. La realidad es dura y las consecuencias son devastadoras, no podemos seguir ignorándolo.
Por Miguel Clariá.
Audios
Te puede Interesar