Las ventajas fiscales de Uruguay para atraer a empresas

El contador público y especialista en Procedimiento Tributario, Marcos Sequeira, precisó en dialogo con Radioinforme 3 las ventajas fiscales que ofrece Uruguay para atraer a empresarios argentinos, tal como busca el presidente electo, Luis Lacalle Pou.

"Las noticias de empresas que se mudan a Uruguay ya vienen hace algunos años, especialmente del sector automotriz. Eligen este país por una cercanía geográfica y porque resulta atractivo el sistema tributario", comenzó.

Si bien es similar al argentino (se divide en nacional, provincial y municipal), los impuestos del orden nacional uruguayo -que incluye a la renta, capitales y consumo- son menos gravosos que en Argentina.

"Mientras que en los últimos consensos fiscales se discutía eliminar Ingresos Brutos, allá esos tipos de tributos no existen. Además, la renta uruguaya es solamente en el país, no como en Argentina que es a nivel mundial", detalló.

El especialista ejemplificó: una familia que resida en Argentina y posea bienes en Uruguay y Estados Unidos debe pagar por estos capitales también en Argentina. De lo contrario, una familia con residencia en Uruguay sólo paga por los bienes que se tenga en ese país.

"Las pymes, además, abonan un 3 por ciento de alícuotas por la renta financiera o ganancia. Mientras que en Argentina el promedio es del 30%. Otro punto es que Uruguay posee zonas francas libre de impuestos", agregó.

También contó que en Uruguay no existe el impuesto al patrimonio neto o capitales. "En Argentina, quienes tengan una propiedad valuada en dos millones de dólares y tenga una deuda similar, tiene que pagar un 1%. En cambio, en el país vecino no se paga nada".

Por último, dijo que la Dirección General Impositiva tiene un tratamiento "más benévolo" con los contribuyentes, en tanto que en Argentina tiene actitudes de "persecución".

"Hay gente no lo está pensando, sino que ya se está mudando. En los últimos años 1.500 argentinos se fueron a Uruguay, según datos oficiales", cerró.

Entrevista de Miguel Clariá