Linchamientos y usurpaciones, signos de una Justicia lenta

La Mesa de Café

Linchamientos y usurpaciones, signos de una Justicia lenta

23/10/2020 | 13:39 | El filósofo Héctor Ghiretti dialogó en Mesa de Café y se refirió al caso Abigail en Tucumán y a la toma de tierras. "La Justicia por mano propia es un retroceso brutal", consideró.

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El pasado domingo, un hecho brutal estremeció a todo el país: una nena de 9 años fue hallada muerta en un descampado de Tucumán con signos de haber sido abusada.

Ante la indignación por el hecho y las sospechas sobre un vecino de la zona, identificado como José Guaymás, los vecinos decidieron hacer Justicia por mano propia: lo encontraron y lo mataron a golpes. Minutos antes de morir, el hombre esbozó sus últimas palabras: "Fue mi primo".

Esta situación de violencia extrema y de Justicia por mano propia se repite por caso en las usurpaciones.

En este contexto Miguel Clariá dialogó con Héctor Ghiretti, investigador y profesor de Filosofía Política e Historia de las Ideas, quien explicó que la Justicia es un principio "que tenemos todos".

"Ese principio se funda en la proporcionalidad de las cosas y las acciones que nos permiten relacionarnos con otras personas. Nuestras relaciones están regidas por un principio de Justicia que es dar a cada uno lo que le corresponde. Es un modo que tenemos de actuar y, por eso, todo el tiempo participamos de la Justicia de mano propia", explicó.

Siempre establecemos relaciones de equilibrio y proporción. Pero hay determinadas relaciones que, por su conflictividad, pueden derivar en compensaciones de venganza. Eso depende del bien que esté en juego.

El especialista señaló que este tipo de reacciones son "altamente peligrosas", ya que pierden la proporcionalidad y deriva en injusticias entre las partes.

"Para estos casos problemáticos, aparece otra definición de Justicia que es un tipo de función social o institución. En esos conflictos graves, recurrimos a una tercera parte que puede dirimir y lo puede hacer con objetividad y sin la pasión que supone la ofensa", afirmó.

En esos casos, aparece el juez como una figura central que se nutre de otras herramientas como las leyes, los procesos, los derechos y el Estado.

"Con la evolución social, hay cada vez más formas de conflicto, lo que demanda más institucionalización".

En definitiva todos tenemos internalizado un principio de Justicia que pierde ese norte cuando se advierte que la Justicia no funciona y no llega. No justificamos la acción, pero si entendemos la indignación y la reacción.

Según Ghiretti, como consecuencia de cada vez más hechos de Justicia por mano propia, se impone una nueva idea que implica que la Justicia supone que las "violencias son causadas por el sistema".

"Por lo tanto, toda reacción contra esa injusticia impersonal y estructural es una expresión de Justicia. Lo que implica una concepción que legitima estas formas de Justicia por mano propia que vemos, por ejemplo, en las usurpaciones. Todos los fenómenos están vinculados como un estado general de la sociedad y la cultura", finalizó

Entrevista de Miguel Clariá.