La alegría de un país pequeño, pero con un corazón enorme

La Mesa de Café

La alegría de un país pequeño, pero con un co

12/07/2018 | 07:31 |

Nino Kordin, croata que vivió en Argentina, y Cristian Sprljan, cordobés de descendencia croata, comentaron lo que significó la clasificación a la final del mundo para el sufrido pueblo de su país.

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La alegría de un país pequeño, pero con un corazón enorme

La clasificación a la final de la Copa del Mundo de la selección de Croacia se transformó en uno de los días más alegres en la joven historia del país, que obtuvo su independencia en 1991 y cuenta con apenas un poco más de cuatro millones de habitantes.

Nino Kordic, croata que vivió diez meses en nuestro país durante 2017, contó a Cadena 3 que es inexplicable la emoción que se vivió en las calles después de que el elenco nacional lograra el memorable triunfo ante Inglaterra y obtenga su pasaje al partido definitorio por primera vez en su historia.

Y es justamente en esta parte del mundo donde viven más de 200 mil descendientes de croatas que pisaron tierras argentinas en tres dolorosos procesos inmigratorios caracterizados por la pobreza extrema y los conflictos bélicos. Cristian Sprljan, cordobés de padre croata y madre argentina, es uno de ellos.

Guerras de los Balcanes que dejó el saldo de millones de víctimas, y heridas que aún no terminan de cerrar.

El Hogar Croata en Córdoba celebró el histórico logro de su seleccionado.

"El espíritu croata se ha visto reflejado en estos jugadores", se enorgulleció, y expresó su alegría de que el fútbol le haya permitido poder transmitirle a sus hijos el amor y la pasión por sus raíces. "Es una inyección de alegría y de pasión que seguramente les va a quedar marcado para toda la vida", aseguró.

Y agregó: "Nos ha hermanado y unido de una forma muy bella, fue algo increíble. Lo que se festejó ayer no fue solamente en Croacia sino en todos los centros croatas de todo el mundo porque ha emigrado mucha gente del país".

Es que más allá de ser un logro deportivo sin igual, la presencia de los "Vatreni" en la final del Mundial significó una reafirmación y demostración del orgullo nacionalista croata ante los ojos del mundo. 

"El fútbol puede demostrar cómo se siente con el corazón cuando juegan como ayer. Sabían que el resultado podía ser histórico", expresó un emocionado Nino, que espera poder celebrar el campeonato del mundo en la plaza principal de Zagreb.

"Era impensado que un país tan pequeño pero con un corazón tan grande, haya llegado a la final", admitió un entusiasmado Cristian, que se ilusiona con poder inundar nuevamente de rojo y blanco las calles de Córdoba.